Con el verano comienza la temporada para recolectar pimientos rojos que se extiende hasta el otoño. Cuando se acumula gran cantidad de pimientos, está la posibilidad de embotarlos en conserva o congelarlos para aprovecharlos durante todo el año. Embotar pimientos es algo tan sencillo como seguir los pasos que se indican a continuación.
Para embotar pimientos rojos es necesario disponer, además de los pimientos, de unos dientes de ajo y de aceite de oliva virgen extra. También son imprescindibles unos botes de cristal con tapa metálica de cierre hermético, ya que son el mejor envase para hacer el vacío a la conserva. Antes de embotar es preciso hervir los botes y las tapas para esterilizar los envases y dejarlos secar sobre un paño limpio.
Preparar el contenido de la conserva
Mientras se van secando los botes, se asan los pimientos en el horno o en la parrilla a fuego lento hasta que estén con la piel casi negra. En ese momento se retiran del fuego y se dejan reposar unos 10 minutos. Conviene que durante ese tiempo los pimientos estén tapados con un trapo o con papel de estraza para que la piel se ablande y suden. Pasado ese tiempo se retira de los pimientos la piel y las pepitas y se dejan tal y como se prefiera embotar; bien enteros o bien cortados en tiras.
Si se desean embotar los pimientos asados con toque de ajillos, en una sartén o en una cazuela con un poco de aceite de oliva se añaden los ajos cortados en láminas, y cuando los ajos estén casi dorados, se añaden los pimientos, una pizca de sal y para corregir la acidez, un poco de azúcar o de edulcorante.
Hacer bien el vacío
Una vez preparados los pimientos se van introduciendo en los botes haciendo presión sobre ellos, para evitar que queden burbujas de aire entre unos y otros. A continuación, se cubren los pimientos con los jugos de la cocción aromatizados con ajo y aceite de oliva de virgen, y se deja un centímetro sin llenar hasta la boca del bote.
Para que la conserva haga bien el vacío, se cierran los botes enroscando la tapa previamente calentada y se ponen a cocer al baño maría durante 10 minutos a fuego suave. Si el tiempo de cocción se alarga pueden deshacerse los pimientos por exceso de calor. Al sacar los botes se colocan boca abajo y se dejan enfriar.
Por último, se deben etiquetar los botes de forma que se indique el contenido y la fecha antes de almacenarlos. Aunque se conserven en un lugar oscuro y seco, es aconsejable consumirlos en un año.